Sucedió ayer a las 7 de la noche. Dos comensales se batieron a duelo por uno de los principales platos de la feria gastronómica con más polvo de Latinoamérica: Mistura.
La trifulca entre ambos amantes de la comida sucedió en el puesto de comida «El tío cochinón». Empezó cuando ambos gorditos llegaron al mismo tiempo para pagar en caja. La pelea se hubiese evitado, pero el cajero, José Gordillo, dijo que se trataba del último ‘chancho al palo’ de la noche. Entonces empezó la megacompetencia.
Del intercambio de palabras pasaron a la discusión, luego a levantar la voz y hacer burla del peso de cada uno (ambos pesaban más de 120 kilos). Luego, pasaron a los golpes y como la policía no pudo detener esa pelea de sumo, les dieron dos armas para terminar con la bronca porque ya era la 1 de la mañana.
«Fue la única solución que encontramos. Antes les echamos comida a un costado, les prometimos dos baldes de KFC y 5 pollos a la barasa y nada. Si bien las armas fueron disparadas de cerca, sólo fueron lesiones leves porque la grasa de ambos amortiguaron las balas», dijo el agente, Benito Camelo, también con sobrepeso, mientras se comía el ‘chancho al palo’ que no pudieron comerse los dos megaenergúmenos.
Cuando les preguntamos a los heridos por qué tanto odio por un pedazo de chancho, contestaron al unísono que más que el lechón se trató de hacer ejercicio para quemar calorías previas a las calorías que luego iban a recuperar porque «el chancho al palo sólo era un aperitivo». Seguiremos engordando.
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