Un hecho inusual ha llamado la atención de todo el mundo y posiblemente de otros planetas. Científicos de la Universidad de Oxford con sede en Los Olivos hallaron al único padre primerizo que no cansa a toda la ciudad contando o posteando las anécdotas de su primer hijo.
Según el jefe del grupo de estudios, Benito Camelo, este hecho ha marcado un precedente importante y posiblemente es la clave para detectar por qué la mayoría de personas cuenta cosas que al resto les importa un comino, un rábano o un pepino.
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“Es común ver en Facebook cosas como ‘miren, mi hijo ya camina’, ‘mi hijo es un genio’, ‘mi hijo pinta, será un artista’, entre otros casos que lindan con el ridículo y hacen de las redes sociales una herramienta inútil y aburrida. Lo peor de todo es que etiquetan a todo lo que se mueva”, dijo el científico mientras nos convencía para no tener hijos porque más personas roban oxígeno y aceleran el cambio climático.
“Seguiremos investigando este caso, por si acaso también clonaremos al padre primerizo y le enseñaremos a dar conferencias para que ayude a los demás padres ridículos en el mundo”, concluyó el científico mientras nos miraba con desprecio porque estudiamos una carrera de letras. Seguiremos presumiendo.
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