Era de esperarse. La Asociación Mundial de Bartenders, Mozos, Guachimanes de Bares y Alcohólicos de Barra acaba de denunciar en Estados Unidos a Gustavo Faverón, ya que “debido a sus sus denuncias por acoso, ha desprestigiado al mojito como trago social en el Perú y lo ha convertido en trago para afanar como un exrecluso de Maranguita, casi como Gringasho”.
Según los demandantes, desde que Faverón escribió a un contacto femenino suyo: “HEY HEY HEY, AMIGA, ¿MOJITOS? GRRRRR, INGRATA… ¿HOLA? TOMARÉ ESO COMO UN SÍ :v”, el mojito pasó a convertirse en un trago triller, de miedo, casi amenazante y de pesadilla para miles de mujeres en el Perú.
“Es una lástima porque muchos bartenders colegas nuestros en Perú ofrecían este trago caribeño en los más distinguidos bares, además organizaban talleres presenciales donde enseñaban a prepararlo. Asimismo, por este trago se había incrementado el consumo de ron y yerbabuena en todo el país, pero eso ya decayó. Todos los empresarios que tengan que ver con este trago han sido víctimas de pérdidas”, dijo el representante de la asociación vía chat de Facebook, mientras nos invitaba un chilcano.
“Ahora todos los bartenders de Perú están apostando por el chilcano, que también es rico, pero lo hacen con miedo porque probablemente Faverón también ha ofrecido a otras mujeres este trago, además de pisco sour, cerveza o chuchuhuasi. Ya tienen miedo de preparar cualquier trago porque temen que salga una nueva denuncia contra el señor literato. Por eso, instamos al público peruano a que vuelvan a tomar este trago, por favor”, agregó el representante mientras nos pedía que le mandemos una foto nuestra en zunga.
Al cierre de esta nota, el bartender nos ofreció ser modelos de calendarios, pero no aceptamos porque aún no tenemos el cuerpo de deseamos. Haremos ejercicios y una dieta estricta para estar a la altura. Seguiremos almorzando.
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