Fue un susto. El expresidente Alejandro Toledo, quien se hospeda en una suite de lujo en el ex Fundo Barbadillo, cayó enfermo ayer en la madrugada, por lo que el personal encargado de su custodia lo atendió de emergencia, llevándolo al centro de salud más cercano, pero el ahora presidiario no mostró mejoría hasta el mediodía.
Cuando ya eran horas de la tarde, al ver que no mejoraba ni un poquito, el jefe del hospital de Ate sugirió enviarlo a otro centro donde seguramente podría atenderlo. Y entonces el mismo Toledo recomendó El Queirolo, a donde luego fue llevado de emergencia. Según fuentes cercanas del mismo bar, Toledo empezó a tener síntomas de mejoría cuando supo reconocer el olor del centro de Lima desde la avenida Javier Prado.
Ya en el jirón Camaná, Toledo se incorporó de inmediato y hasta no necesitó camilla y pidió la mesa del fondo, donde las mesas están cerca al almacén de tragos. “Hemos visto casi un milagro. El personal de salud está aliviado porque ya no tendrán que llenar formatos aburridos. Ahora, lo difícil será sacarlo de ese bar”, dijo el chofer de la ambulancia.
Al cierre de esta nota, preguntamos cuándo reabrirán el Bar de Ciro, pero no tuvimos respuesta. Más información, cuando reabrán El Mirador.
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