Tiró los panes al aire. El panadero César Chapla se hartó de tener paciencia y en un arranque de cólera cerró la calle de su barrio con sacos de harina para reclamar que Dios jamás lo ayudó, pese a que lleva más de 30 años levantándose temprano.
“Yo era fiel a ese refrán de que ‘Al que madruga, Dios lo ayuda’ y miren, sigo siendo pobre, siguen gobernando los mimos corruptos, todo sigue subiendo y yo hasta ahora no termino de pagar ni mi horno de barro”, dijo el señor César mientras nos intentaba quemar con su plancha para sacar panes.
En entrevista con Última Noticia, el cardenal nos dijo que si bien Dios es Todopoderoso, también se olvida de algunos pedidos y otras veces está ocupado resolviendo casos de pefofilia en otros países.
“En este mes, por ejemplo, Dios ha estado viendo el caso de los sodalicios para exculparlos de todo. ¿Crees que pueda tener tiempo para el que prepara todos los días el cuerpo de Cristo?”, dijo mientras se tomaba una buena copa de vino.
Por su parte, el panadero César Chapla agregó que hoy no habrá pan en su panadería, que solo habrá pan de ayer. Y que a partir de mañana se despertará al mediodía para tener el pan listo a las 3 de la tarde y que botará su despertador y matará a su gallo. Seguiremos almidonando.
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