Una lamentable realidad. Las antenas 5G son un gran peligro: no solo han creado el coronavirus, la corrupción y el sonambulismo, sino también están alterando mentalmente a los peruanos con sus rayos ultravioletas y ultrarrojos, y ellos los está convirtiendo en faranduleros, fujiapristas y antauristas. Un primer síntoma de estos impactos es el uso de mascarilla en las papadas. Si tienes un amigo o familiar que hace eso, posiblemente está camino a su autodestrucción y la destrucción del país entero, incluido Arequipa.
Según una reciente investigación de un señor que cree que el coronavirus es un invento de Bill Gates para dominar el mundo desde su baño mientras lee su Facebook, estas antenas terminarán con nuestra sociedad porque si los peruanos siguen exponiéndose a estas podría tener doble moral y ello puede causar un conflicto interno, casi como lo que tiene un caviar consciente, y ello puede hacer que se autodestruya.
“La verdad hermano, yo solo quiero mi bono, a la mierda, que se mueran todos”, nos dijo el investigador con la mascarilla en la papada cuando intentamos entrevistarlo a cinco metros de distancia, gritando.
Al cierre de este micronoticiero en cuarentena, el mundo contaba con 4 millones de contagiados, pero no tu vecino que escucha música a todo volumen y no te deja vivir. Seguiremos muriendo.
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