Al igual que el opositor Juan Guaidó, quien se autoproclamó presidente de Venezuela para darle un nuevo rumbo a dicho país, la candidata de la izquierda peruana, exsimpatizante chavista y luchadora antimperialista, Verónika Mendoza, no pudo con su genio y no perdió la oportunidad para autoproclamarse presidenta llanera.
El hecho ocurrió en un café Starbucks de Barranco, donde suele reunirse la izquierda de Nuevo Perú. Verónika, motivada por el pueblo venezolano, se subió a la mesa del café y, luego de tomarse un capuchino, se puso la banda venezolana y juró en nombre de Bolívar y la tizana.
Cuando terminó su autoproclamación, la prensa le preguntó si Venezuela era una dictadura o una democracia, a lo cual Verónika respondió: “Yo no voy a caer en ese juego nuevamente porque lo que necesitamos ahora es una nueva Constitución, un cambio de modelo económico y un Starbucks en el local de Nuevo Perú, así como una tienda de comida orgánica, para nuestros seguidores”, dijo la candidata.
Ampliación, cuando dejes de escribirle a tu ex.
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