
Luego de largas sesiones con el psicólogo, la Policía Nacional y un guardaparque, un cajamarquino quedó convencido de que no puede hacer lo que quiere en esta vida, sobre todo si es de Chota, Celendín o Matara, y se le condenó a dejar de beber una semana. ¿El motivo? Abajo se lo contamos.
Resulta que el joven ebrio fue detenido por la Policía Nacional porque quiso festejar a lo grande los carnavales de su tierra, pero a falta de árboles en Lima, intentó hacer una yunza con su árbol genealógico, lo cual fue alertado ante las autoridades por sus propios vecinos, ya que a nadie le gustaría que le estén dándole de hachazos en medio de una fiesta.
El hecho ocurrió en San Martín de Porres, en un club cajamarquino donde cada fin de semana se encuentran cajamarquinos y descendientes de estos para beber tranquilamente tres o cuatro días seguidos.
Se supo que el joven, cuyo nombre mantendremos en reserva porque luego la gente lo puede invitar a chupar, está arrepentido del hecho porque –asegura–, estaba borracho y no sabía lo que hacía.
“Yo no quise poner a mi familia como yunza, más bien, yo quise poner a la familia de mi mujer como yunza, pero ese día no estaban”, dijo el cajamarquino mientras tomaba cañazo con chicha de jora en un balde de pintura. Seguiremos bailando.
Comentarios Facebook