Como se sabe: antes, durante y luego de su visita al Perú, el Papa Francisco fue acompañado por un grupo de periodistas vestidos de monaguillos listos para recibir la hostia. Por ello, trataron al Papa como si cargaran a un bebé de 1 día de nacido y no le hicieron preguntas incómodas porque se puede molestar y así ya no regresa más al Perú, el país que lo necesita para declarar más feriados en vano.
Sin embargo, poco les duró el Edén que se habían fabricado a punta de un comportamiento como manda la iglesia, porque un pasajero hizo una pregunta incómoda al Sumo Pontífice, santo en la tierra y heredero del Sinaí. Se trataba nada menos que de un pasajero que “se confundió de vuelo” y abordó por error el transporte papal.
“Mire señor periodista, yo no quería venir al Vaticano porque, para empezar, al único Vaticano que conozco es al narcotraficante que trabajaba con Montesinos. Además, yo ni siquiera me quería subir a un avión, pero como estaba apurado y la verdad, un poco ebrio porque la Martha me invitó ayer al bautizo de su prima, que por cierto me hacía ojitos y me dijo para agregarle al Wasá, pero le dije que no tenía crédito y además, mire, mi celular es Nokia todavía, con lamparita, pero bueno. ¿Qué le estaba diciendo? Ah ya, yo quería tomar el Huaralino, pero el carro me dejó en Tomás Valle con Faucett y me subí a ese avión pensando que estaba en Fiori, yo quería irme a Huacho”, dijo Aquiles Abordo, especialista en construcciones metálicas. Conocido en su tierra como “El hombre del fierro”.
“Para no hacerla larga, yo pensé que el Papa vendía algo y me hice el dormido. Luego, cuando pasó por mi sitio, ronqué todavía y el Papa me miró raro, y yo le dije: ‘¡Qué me miras oye!’. Claro que yo no sabía que era el Papa hasta que bajamos del avión y 30 hombres de seguridad me bajaron cogoteado y me explicaron amablemente, mientras me torcían el tobillo, que ese viejito vestido de blanco era el Papa así como Juan Pablo II. Yo dije, qué va a ser, luego me botaron afuera del aeropuerto y pensé que todavía estaba en Lima, pero cuando me empezaron a hablar en otro idioma, yo me dije: ¡Carajo, otra vez estoy en otro país!”, dijo lamentablemente el entrevistado.
Pasando al tema Sodalicio, el Vaticano afirmó que ya están en conversaciones con la Fiscalía peruana para acelerar con las investigaciones del tema de Luis Figari. Hasta donde se supo, el Fiscal de turno dijo que para no parecer drástico, ha pedido 25 años de prisión preventiva para el religioso que huyó al Vaticano para olvidarse de las penas.
Seguiremos informando.
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