Típica de peruanos. Desde que el Inca Garcilaso fue abandonado por su papá, el desentenderse de los hijos es considerado un deporte nacional en nuestro país.
Es muy común el «voy a comprar cigarrillos» o simplemente cambiar de número de celular y de redes sociales por parte del nuevo papá.
En estas últimas semanas, se supo que la Foquita le pasa el dinero suficiente para pagar la deuda externa a su exesposa. Al saber la cantidad, miles de hombres que no le dan ni un caramelo a sus hijos han pegado el grito en el cielo.
«Qué ambiciosa esa mujer, señor periodista, yo a mi hijo le mando solo los saludos y con eso le alcanza sobrado para vivir, además me debería agradecer por haberle conseguido una buena madre que le paga todo», nos comentó un detenido por no pasar la pensión a sus hijos desde que nacieron.
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