Problema resuelto. En los últimos días, se anunció que Fito Páez de presentará en la ceremonia del final de la Copa Libertadores. Muchos incrédulos y hombre de poca fe -pero no para creerle a su ex- desconfiaron que pueda llegar a su siguiente presentación en el Estadio de San Marcos.
Sucede que el tráfico en la Javier Prado es más insoportable que leer las columnas de Mijael Garrido Lecca. Un peruano promedio pierde en total 30 años de su vida en esa avenida.
Precavidos, la organización de Vivo por el Rock ha decidido contratar un bus de transporte público que es capaz de vencer las leyes de la materia: El Chino. Unos buses azules que normalmente parecen un cometa por la velocidad en la que van por Evitamiento.
Conversamos con el chófer encargado de transportar de Ate a San Marcos al cantante argentino: «Ojalá que ese señor quiera pagar pasaje completo y no ande regateando 50 céntimos. Respetando los semáforos, llegaremos en 10 minutos, incluyendo 2 minutos que bajaré para orinar en la llanta trasera».
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